domingo, 15 de febrero de 2015

De Navidad a Febrero

Hola niñas y niños:

Hace tiempo que no actualizo el blog, lo sé. Desde la última entrada han ocurrido pocas cosas dignas de robaros vuestro valioso tiempo, esto junto con mi vagancia son las principales razones de la tardanza. Mis disculpas.

Como ya publiqué, las navidades las pude pasar con la familia. Hay un vídeo mío cantando "La Macarena" en Nochebuena que lo demuestra :-D (espero que nunca salga a la luz pública). La vuelta a Mánchester fue curiosa... Adornada por un poco de nieve que no llegó a cubrir pero hizo el tayecto en tranvía más entretenido. Sobre todo porque la buena de Laura, que también volvía de pasar las fiestas en su casa, se pasó el viaje haciendo vídeos.
Entrada Facebook Laura
El tiempo ha pasado tranquilo desde entonces. Pocas cosas han roto la monotonía. Una de ellas ha sido la emisión de "Españoles en Mánchester" (o Españoles en el Mundo: Mánchester, o como se llame...). El caso es que me enteré tarde, mal y nunca de cuando se emitía, así que no pude avisar en condiciones. Tampoco lo consideré muy importante porque, ni salgo yo, ni nadie que conozca.
Tras ver el programa (no entero, solo fragmentos porque me aburre bastante) hay dos ideas que permanecen en mi cabeza:

La primera es que la versión que dan de la gente que vive fuera de España no es todo lo real que debería. Estoy seguro que por cada "Españoles en..." se podría hacer otro con gente que está puteada, o con como hay casos de racismo (Parece increíble ¿eh? pues a mí hace tiempo no me dejaron entrar en un bar por ser latino. Y me lo dijeron así, sin cortarse un pelo). Pero sin ir al extremo, podrían poner gente levantándose a las 5 para ir a currar o lo "limpios" que están los autobuses a última hora de la tarde...

La segunda idea con que me quedo es que Mánchester es como las personas feas: todo el mundo se empeña en demostrar su "gran personalidad". Si amigos y amigas: Mánchester es feo (y sucio en según qué zonas). Uno se da cuenta de estas cosas sobre todo cuando sale. Atención porque aquí viene lo más bonito de este post. Ayer la buena de Belén y yo nos fuimos a Conwy, en el norte de Gales. Una preciosidad de sitio. Pero vamos por pasos: Para llegar a Conwy tuvimos que hacer escala de 20 min en otra villa muy bonita llamada Chester. Tanto quisimos aprovechar la parada que perdimos el segundo tren :-(
No hay mal que por bien no venga dice el refrán. Eso mismo digo yo. Gracias a este desliz pudimos visitar Llandudno, otro pueblo supercuidado al lado del mar. Lo más peculiar de este sitio es que allí fue donde el bueno de Lewis Carrol conocío a la familia Liddell, cuya hija Alice le inspiró para escribir "Alice's Adventures in Wanderland" o lo que es lo mismo: "Las Aventuras de Alicia en el País de las Maravillas". De hecho, hay en el pueblo esculturas de madera que nos recuerdan los principales personajes de la historia como el sombrerero, aquí presente.
Sombrerero (y) loco
Después de una rápida visita a Llandudno, nos fuimos a Conwy en autobús y ¡QUÉ SITIO TAN CHULO!
Castillo, muralla, suelos empedrados, una bahía llena de barcos, Fish&Chips dignos de su nombre,calles estrechas, gente amable...¡Oh! Que no se me olvide... y la casa más pequeña de Gran Bretaña (tiene 2 alturas y el área de cada una es poco más grande que una mesa de ping-pong).

Casa más pequeña de Gran Bretaña

Vista de Conwy desde la muralla
Interior castillo Conwy
Muralla con la bahía al fondo
Una pena que el día no fuese un poquito más luminoso pero, al menos no llovió ni hizo viento :-)
Después de ver esto, uno vuelve a Mánchester y se da cuenta de que "tiene mucha personalidad"...

Para cerrar el "petezme" de hoy, os dejo con un dilema existencial que me ha surgido esta semana en zapatilandia:
Resulta que la empresa ha decidido hace tiempo ya, apoyar causas benéficas. Este año han sacado unas pulseritas para financiar la lucha contra el SIDA. Obviamente estoy a favor de que las multinacionales con grandes beneficios, como es el caso, aporten algo a la sociedad a pesar de que los zapatos están hechos en su mayoría en China, India, Thailandia, es decir, sitios donde las condiciones de trabajo de los obreros distan de ser las ideales. Pero este no es mi dilema de hoy. Lo que me trae a mal traer estos días, es que han "pedido" a todos los empleados que apoyemos su causa benéfica (de turno). No solo eso si no que además han especificado que además de comprar las pulseras hay que publicarlo en las redes sociales ( y también han dicho cómo quieren que lo publiquemos).
¿Qué opinión os merece? ¿Qué pensáis de que en mi empresa dispongan así de alegremente de mi perfil en redes sociales? Espero vuestra opinión.

Cuidáos mucho. Nos vemos en el próximo post.